A partir de la salida en Estación Central, pasando por el antiguo túnel Matucana, se evoca los primeros viajes del Ferrocarril Santiago-Valparaíso, inaugurado en el año 1855. De esta manera, el convoy surcará el valle metropolitano, pasando por Quilicura y los humedales de Batuco para explorar la Cordillera de la Costa.
El viaje continuará por Til Til y luego enfilará a hacia la cuesta El Tabón -el punto más alto de la red central sur de Ferrocarriles- que fue un gran esfuerzo de construcción para la época y que ofrece hermosos paisajes del inicio del Valle del Aconcagua.
El viaje es de 143 kilómetros para vivirlo como antaño, disfrutando de los paisajes, encabezado por dos locomotoras diésel eléctricas, junto a coches alemanes de las décadas del 20, 30 y 50 en primera clase, salón y comedor.
Pasado Llay Llay, el Tren del Recuerdo se introduce en la ribera sur del Aconcagua para iniciar su descenso a las ciudades de Calera y Quillota.
Cinco kilómetros antes del destino final, el tren turístico pasará por el antiguo túnel de San Pedro, lugar donde converge la flora y fauna del sector, para luego llegar a la estación terminal de Limache alrededor de las 12:30 horas.
En este terminal, los pasajeros podrán disfrutar de los atractivos turísticos de la comuna y quienes gusten, podrán continuar viaje en el servicio Limache – Puerto de EFE Valparaíso.
